El rendimiento de los Michelin condicionó tremendamente la carrera. Al igual que en las otras categorías el warm up fue decisivo para realizar los últimos ajustes, y éstos tuvieron bastante incidencia en el resultado final.
Para Stoner ésta sería una carrera importante. El circuito favorecía a su montura. Sólo faltaba ver como había encajado la derrota de Laguna Seca. Los entrenamientos fueron buenos, pero en seco no lograba distanciar sus tiempos de los de Rossi lo suficiente como para pensar en la escapada. Al principio de carrera consiguió unos metros importantes y la diferencia con Valentino aumentaba y disminuía muy lentamente. El australiano tras la humillación sufrida en Estados Unidos no quería encontrarse con el italiano en una batalla codo a codo. Esto le obligaba a forzar mas si quería desembarazarse de él. Y fue lo que hizo pero esta vez la jugada le salió mal, y su Ducati no tiene aún ningún sistema electrónico para salvar las caídas perdiendo la rueda delantera.
Aunque Rossi le estaba presionando al acercarse al australiano, quién más se presionó fue él mismo con su planteamiento de carrera. En lugar de aceptar una carrera con Valentino y estudiarle cuidadosamente, eligió jugárselo a todo o nada. Tras lo de Laguna se sabía que las próximas carreras serían decisivas en el devenir del campeonato. Esa carrera tuvo repercusiones a nivel moral en los pilotos y estaba por ver como lo habían encajado, sobre todo Casey. Pues el australiano se mostró nervioso, con miedo a que se repitiera la escena y no supo controlar la presión en un momento fatídico del campeonato. Y no es la primera vez que le ocurre.
La temporada 2005 Stoner venía recuperando puntos a un lesionado Pedrosa y la carrera de Phillip Island sería la que mediría sus opciones a llevarse el mundial. Corría en casa y en un circuito favorable para su Aprilia. Dominó el fin de semana, pero en carrera se fue al suelo perdiendo todas sus opciones de llevarse el título.
Después de varias carreras con las cosas de cara Casey parecía más fuerte que en 2007. Sin embargo el cambio de guión que se produjo en la carrera americana le ha hecho perder la calma, lo que merma su potencial. En cualquier caso, ya no tiene nada que perder y esa puede ser su mejor arma.
Valentino estaba más cerca de Stoner que en el anterior Gran Premio. Sin embargo aún debía mejorar si quería luchar con el piloto de Ducati. En el warm up, las diferencias entre ambos eran mínimas en los dos últimos parciales y en el primero. Pero Rossi perdía entre tres y cuatro décimas en el T2. De la mejora que lograra junto a su equipo en ese punto dependería el resultado de la carrera. Y “El Doctor” sabía que era importante no dar tregua a Casey, que éste no pudiera recuperar la confianza.
En la primera vuelta perdió un segundo, pero tiró al máximo haciendo de la carrera un sprint a ritmo infernal entre ellos dos. Estaba determinado a que la carrera se decidiera en el cuerpo a cuerpo, donde él tiene ventaja. Tras la victoria elogiaba a Jeremy Burgess ( su jefe técnico) por las acertadas variaciones en la puesta a punto. Y es que el italiano sabe de la importancia de tener a Burgess motivado. Su jefe de mecánicos es australiano y tiene una relación cordial con Stoner. Pero Rossi cree que Jeremy debe sentir que está trabajando con el genio, con quién guarda un as bajo la manga. De la ilusión que generan el binomio Rossi-Burgess sale la fuerza del equipo Yamaha y Valentino quiere que le ayude en esta labor. Además de un brillante técnico Jeremy es un gran psicólogo, y su experiencia en Honda con Doohan y los años con Rossi le hacen el gurú de la categoría reina. Sin embargo ver a un compatriota como Stoner dominar MotoGP le trae recuerdos de cuando Mick aplastaba a sus rivales. Escuchar el himno de tu país después de lograr una victoria es el mejor momento, por eso Rossi destaca la importancia del equipo, para que Jeremy tenga bien claro de que bando está y hacia donde tiene que hacer fuerza.
Los 50 puntos que tiene de ventaja deberían ser suficientes viendo su rendimiento en los últimos meses, pero con Casey nunca se sabe. Valentino es consciente de la dificultad que tiene recuperar el título, con sus nuevos rivales. Por ello está dedicándose a esta labor con mayor empeño y profesionalidad que nunca. Difícilmente caerá en la relajación, teniendo en cuenta lo largos que se le deben estar haciendo estos dos años sin ganar el mundial.
Elías consiguió su primer podium. Desde que recibió las nuevas piezas de Ducati ha tenido una trayectoria ascendente. En Brno empezó bien el viernes y no se estancó. En el warm up mejoró. lo que le permitía encarar la carrera con esperanzas. Además su ritmo fue bueno desde el principio algo que ayudó a la hora de remontar. Su vuelta a vuelta mejoró, como en él es habitual, cuando faltaba menos para el final. Volvió a mostrar sus dotes como frenador a la hora de adelantar, pero tenía algunos problemas al mover la moto en los cambios de dirección. Su Desmosedici parecía muy pesada, falta de agilidad. Aunque esto es un problema, también significa que Toni tiene margen de mejora con la GP8 y su puesta a punto. Algo necesario si aspira a conseguir algún podium más, puesto que en este Gran Premio el rendimiento de Michelin facilitó su resultado, que en cualquier caso es muy meritorio. Es el primer podium de un piloto Ducati, sin contar a Stoner, y lo ha logrado superando a Melandri y a Guintoli en cuanto a calidad y actitud. El test post Gran Premio debe servirle para confirmar las buenas sensaciones y la mejora en los reglajes, de cara a realizar un buen final de temporada sin bajar del Top 10.
Suzuki y Kawasaki volvieron a rodar en los puestos de cabeza. Aunque los neumáticos tuvieron mucho que ver en esta circunstancia, ambas marcas deben mejorar su rendimiento. Cuentan con pilotos competitivos pero que no están sabiendo marcar una línea de evolución efectiva. Las fábricas tampoco ayudan al realizar un trabajo irregular. Por cada vez que aciertan cometen uno o dos errores, y esto dificulta que exista una buena dinámica de trabajo. Aunque el presupuesto no es un problema, la planificación y el trabajo de los ingenieros sí. Suzuki está realizando pruebas para el año que viene. Mientras este año tienen una moto híbrido entre la versión 2007 y la que debería ser la de esta temporada. En la evolución del prototipo 2008 Suzuki perdió las virtudes de su anterior montura (estabilidad y eficacia en frenadas) pero no mejoró el principal defecto de las GSV ( el funcionamiento del chasis en las curvas rápidas) lo que pone en evidencia el trabajo de ingenieros y probadores.
En Kawasaki desperdiciaron el tiempo probando el motor screamer, pensando que si en Ducati funcionaba en su caso también. Después de varias pruebas lo desecharon. Es curioso que viendo los problemas que estaba generando esta configuración en las Desmosedici, pese a llevar un año introduciendo novedades para paliarlo, decidieran apostar por él. En lugar de buscar verdaderas innovaciones imitan lo que hacen otras fábricas y con poco criterio. El único aspecto en el que han mejorado las Ninja es en las frenadas y Hopkins es quien más mérito tiene por sus buenas indicaciones y dominio de ésta acción. El americano es uno de los mejores frenadores de la categoría. Tampoco han sabido mantener las virtudes de su 990. Las “Kawa” destacaban por tener un buen chasis, que permitió a Nakano cuajar buenas actuaciones. Pero la Ninja es actualmente una moto brusca, poco evolucionada tecnológicamente y con notables carencias en muchos apartados. MotoGP es una categoría complicada y que exige grandes esfuerzos, aunque viendo el desarrollo que efectúan estas dos grandes fábricas uno se pregunta cuales son sus objetivos. Porque dudo que ser comparsa sea plato de buen gusto.
Michelin está poniendo una base sólida para que el próximo año haya monogoma. Los franceses no están a un nivel aceptable y esto repercute en el rendimiento de sus pilotos y en el espectáculo. Bridgestone se aprovecha su experiencia en F1 para hacer neumáticos que no solo tienen más agarre, sino que su duración y constancia es mayor. Los franceses no son capaces de igualarles en ningún aspecto, por más que invierten, y esto les deja en mal lugar frente a Dorna y las fábricas.
Pedrosa acabó realmente descontento con sus gomas. No tenía el grip suficiente, y el neumático delantero no aguantó ni media carrera. Su actuación fue decepcionante y vergonzosa. Aunque rendir algo mejor el resultado habría sido el mismo. Nunca se había visto a Dani tan desmotivado y poniendo tan poco encima de la moto. Su entrada en curva era penosa, excesivamente lenta. Aunque en el warm up lo hizo bien la carrera fue otro cantar. Y Pedrosa terminó muy enfadado y hablando con claridad del comportamiento de Michelin. Estas palabras le pueden salir caras, pero el catalán está convencido que ésta será su última temporada con las gomas francesas. Y ellos querrán salvar el orgullo, o lo que les quede, en sus (previsiblemente) últimas carreras en MotoGP. En ese caso deberán apostar por Dani y Jorge, aunque las palabras del primero les hayan sentado mal.
Lorenzo fue capaz de progresar y mostró una actitud positiva, al igual que Dovizioso. Aunque ellos no tuvieron que soportar los Michelin 2007 y ésta situación no les supuso tener un dejá-vu. Su ritmo mejoraba cuando tenían un piloto Bridgestone delante y en cuanto rodaban en solitario bajaban medio segundo. Aún así su vuelta a vuelta era casi tres segundos más lento que el de la pareja Rossi-Stoner. Andrea finalizó por tercera carrera consecutiva como el mejor piloto Michelin, pero cada vez está terminando más lejos del podium lo que refleja muy bien el rendimiento de sus neumáticos. Mientras Michelin despertaba la polémica de la monomarca Nakano montaba las gomas japonesas en su recién estrenada Honda oficial exhibiendo un gran rendimiento y explicando las muchas mejoras que tiene el nuevo modelo. Algunas de estas novedades no las pueden explotar al máximo los pilotos Repsol por sus neumáticos y seguro que en Honda han tomado buena nota de lo sucedido este fin de semana. El ritmo de Shinya fue muy bueno por momentos, y si hubiera salido mejor el segundo puesto de Toni habría estado a su alcance.
El debate está abierto. Casey y Valentino se oponen a la monogoma, pero Dani y Jorge están a favor. Lucha de poderes y delicada situación para Dorna que se juega mucho en su decisión. Sea cual sea habrá polémica. Pero un detalle que explica la situación. El carismático y amable Colin Edwards cree que hay que sentarse a hablar de las gomas. Que un piloto fiel a Michelin como él, esté preocupado es muy significativo.
Para Stoner ésta sería una carrera importante. El circuito favorecía a su montura. Sólo faltaba ver como había encajado la derrota de Laguna Seca. Los entrenamientos fueron buenos, pero en seco no lograba distanciar sus tiempos de los de Rossi lo suficiente como para pensar en la escapada. Al principio de carrera consiguió unos metros importantes y la diferencia con Valentino aumentaba y disminuía muy lentamente. El australiano tras la humillación sufrida en Estados Unidos no quería encontrarse con el italiano en una batalla codo a codo. Esto le obligaba a forzar mas si quería desembarazarse de él. Y fue lo que hizo pero esta vez la jugada le salió mal, y su Ducati no tiene aún ningún sistema electrónico para salvar las caídas perdiendo la rueda delantera.
Aunque Rossi le estaba presionando al acercarse al australiano, quién más se presionó fue él mismo con su planteamiento de carrera. En lugar de aceptar una carrera con Valentino y estudiarle cuidadosamente, eligió jugárselo a todo o nada. Tras lo de Laguna se sabía que las próximas carreras serían decisivas en el devenir del campeonato. Esa carrera tuvo repercusiones a nivel moral en los pilotos y estaba por ver como lo habían encajado, sobre todo Casey. Pues el australiano se mostró nervioso, con miedo a que se repitiera la escena y no supo controlar la presión en un momento fatídico del campeonato. Y no es la primera vez que le ocurre.
La temporada 2005 Stoner venía recuperando puntos a un lesionado Pedrosa y la carrera de Phillip Island sería la que mediría sus opciones a llevarse el mundial. Corría en casa y en un circuito favorable para su Aprilia. Dominó el fin de semana, pero en carrera se fue al suelo perdiendo todas sus opciones de llevarse el título.
Después de varias carreras con las cosas de cara Casey parecía más fuerte que en 2007. Sin embargo el cambio de guión que se produjo en la carrera americana le ha hecho perder la calma, lo que merma su potencial. En cualquier caso, ya no tiene nada que perder y esa puede ser su mejor arma.
Valentino estaba más cerca de Stoner que en el anterior Gran Premio. Sin embargo aún debía mejorar si quería luchar con el piloto de Ducati. En el warm up, las diferencias entre ambos eran mínimas en los dos últimos parciales y en el primero. Pero Rossi perdía entre tres y cuatro décimas en el T2. De la mejora que lograra junto a su equipo en ese punto dependería el resultado de la carrera. Y “El Doctor” sabía que era importante no dar tregua a Casey, que éste no pudiera recuperar la confianza.
En la primera vuelta perdió un segundo, pero tiró al máximo haciendo de la carrera un sprint a ritmo infernal entre ellos dos. Estaba determinado a que la carrera se decidiera en el cuerpo a cuerpo, donde él tiene ventaja. Tras la victoria elogiaba a Jeremy Burgess ( su jefe técnico) por las acertadas variaciones en la puesta a punto. Y es que el italiano sabe de la importancia de tener a Burgess motivado. Su jefe de mecánicos es australiano y tiene una relación cordial con Stoner. Pero Rossi cree que Jeremy debe sentir que está trabajando con el genio, con quién guarda un as bajo la manga. De la ilusión que generan el binomio Rossi-Burgess sale la fuerza del equipo Yamaha y Valentino quiere que le ayude en esta labor. Además de un brillante técnico Jeremy es un gran psicólogo, y su experiencia en Honda con Doohan y los años con Rossi le hacen el gurú de la categoría reina. Sin embargo ver a un compatriota como Stoner dominar MotoGP le trae recuerdos de cuando Mick aplastaba a sus rivales. Escuchar el himno de tu país después de lograr una victoria es el mejor momento, por eso Rossi destaca la importancia del equipo, para que Jeremy tenga bien claro de que bando está y hacia donde tiene que hacer fuerza.
Los 50 puntos que tiene de ventaja deberían ser suficientes viendo su rendimiento en los últimos meses, pero con Casey nunca se sabe. Valentino es consciente de la dificultad que tiene recuperar el título, con sus nuevos rivales. Por ello está dedicándose a esta labor con mayor empeño y profesionalidad que nunca. Difícilmente caerá en la relajación, teniendo en cuenta lo largos que se le deben estar haciendo estos dos años sin ganar el mundial.
Elías consiguió su primer podium. Desde que recibió las nuevas piezas de Ducati ha tenido una trayectoria ascendente. En Brno empezó bien el viernes y no se estancó. En el warm up mejoró. lo que le permitía encarar la carrera con esperanzas. Además su ritmo fue bueno desde el principio algo que ayudó a la hora de remontar. Su vuelta a vuelta mejoró, como en él es habitual, cuando faltaba menos para el final. Volvió a mostrar sus dotes como frenador a la hora de adelantar, pero tenía algunos problemas al mover la moto en los cambios de dirección. Su Desmosedici parecía muy pesada, falta de agilidad. Aunque esto es un problema, también significa que Toni tiene margen de mejora con la GP8 y su puesta a punto. Algo necesario si aspira a conseguir algún podium más, puesto que en este Gran Premio el rendimiento de Michelin facilitó su resultado, que en cualquier caso es muy meritorio. Es el primer podium de un piloto Ducati, sin contar a Stoner, y lo ha logrado superando a Melandri y a Guintoli en cuanto a calidad y actitud. El test post Gran Premio debe servirle para confirmar las buenas sensaciones y la mejora en los reglajes, de cara a realizar un buen final de temporada sin bajar del Top 10.
Suzuki y Kawasaki volvieron a rodar en los puestos de cabeza. Aunque los neumáticos tuvieron mucho que ver en esta circunstancia, ambas marcas deben mejorar su rendimiento. Cuentan con pilotos competitivos pero que no están sabiendo marcar una línea de evolución efectiva. Las fábricas tampoco ayudan al realizar un trabajo irregular. Por cada vez que aciertan cometen uno o dos errores, y esto dificulta que exista una buena dinámica de trabajo. Aunque el presupuesto no es un problema, la planificación y el trabajo de los ingenieros sí. Suzuki está realizando pruebas para el año que viene. Mientras este año tienen una moto híbrido entre la versión 2007 y la que debería ser la de esta temporada. En la evolución del prototipo 2008 Suzuki perdió las virtudes de su anterior montura (estabilidad y eficacia en frenadas) pero no mejoró el principal defecto de las GSV ( el funcionamiento del chasis en las curvas rápidas) lo que pone en evidencia el trabajo de ingenieros y probadores.
En Kawasaki desperdiciaron el tiempo probando el motor screamer, pensando que si en Ducati funcionaba en su caso también. Después de varias pruebas lo desecharon. Es curioso que viendo los problemas que estaba generando esta configuración en las Desmosedici, pese a llevar un año introduciendo novedades para paliarlo, decidieran apostar por él. En lugar de buscar verdaderas innovaciones imitan lo que hacen otras fábricas y con poco criterio. El único aspecto en el que han mejorado las Ninja es en las frenadas y Hopkins es quien más mérito tiene por sus buenas indicaciones y dominio de ésta acción. El americano es uno de los mejores frenadores de la categoría. Tampoco han sabido mantener las virtudes de su 990. Las “Kawa” destacaban por tener un buen chasis, que permitió a Nakano cuajar buenas actuaciones. Pero la Ninja es actualmente una moto brusca, poco evolucionada tecnológicamente y con notables carencias en muchos apartados. MotoGP es una categoría complicada y que exige grandes esfuerzos, aunque viendo el desarrollo que efectúan estas dos grandes fábricas uno se pregunta cuales son sus objetivos. Porque dudo que ser comparsa sea plato de buen gusto.
Michelin está poniendo una base sólida para que el próximo año haya monogoma. Los franceses no están a un nivel aceptable y esto repercute en el rendimiento de sus pilotos y en el espectáculo. Bridgestone se aprovecha su experiencia en F1 para hacer neumáticos que no solo tienen más agarre, sino que su duración y constancia es mayor. Los franceses no son capaces de igualarles en ningún aspecto, por más que invierten, y esto les deja en mal lugar frente a Dorna y las fábricas.
Pedrosa acabó realmente descontento con sus gomas. No tenía el grip suficiente, y el neumático delantero no aguantó ni media carrera. Su actuación fue decepcionante y vergonzosa. Aunque rendir algo mejor el resultado habría sido el mismo. Nunca se había visto a Dani tan desmotivado y poniendo tan poco encima de la moto. Su entrada en curva era penosa, excesivamente lenta. Aunque en el warm up lo hizo bien la carrera fue otro cantar. Y Pedrosa terminó muy enfadado y hablando con claridad del comportamiento de Michelin. Estas palabras le pueden salir caras, pero el catalán está convencido que ésta será su última temporada con las gomas francesas. Y ellos querrán salvar el orgullo, o lo que les quede, en sus (previsiblemente) últimas carreras en MotoGP. En ese caso deberán apostar por Dani y Jorge, aunque las palabras del primero les hayan sentado mal.
Lorenzo fue capaz de progresar y mostró una actitud positiva, al igual que Dovizioso. Aunque ellos no tuvieron que soportar los Michelin 2007 y ésta situación no les supuso tener un dejá-vu. Su ritmo mejoraba cuando tenían un piloto Bridgestone delante y en cuanto rodaban en solitario bajaban medio segundo. Aún así su vuelta a vuelta era casi tres segundos más lento que el de la pareja Rossi-Stoner. Andrea finalizó por tercera carrera consecutiva como el mejor piloto Michelin, pero cada vez está terminando más lejos del podium lo que refleja muy bien el rendimiento de sus neumáticos. Mientras Michelin despertaba la polémica de la monomarca Nakano montaba las gomas japonesas en su recién estrenada Honda oficial exhibiendo un gran rendimiento y explicando las muchas mejoras que tiene el nuevo modelo. Algunas de estas novedades no las pueden explotar al máximo los pilotos Repsol por sus neumáticos y seguro que en Honda han tomado buena nota de lo sucedido este fin de semana. El ritmo de Shinya fue muy bueno por momentos, y si hubiera salido mejor el segundo puesto de Toni habría estado a su alcance.
El debate está abierto. Casey y Valentino se oponen a la monogoma, pero Dani y Jorge están a favor. Lucha de poderes y delicada situación para Dorna que se juega mucho en su decisión. Sea cual sea habrá polémica. Pero un detalle que explica la situación. El carismático y amable Colin Edwards cree que hay que sentarse a hablar de las gomas. Que un piloto fiel a Michelin como él, esté preocupado es muy significativo.
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