Motos y motociclismo: Kawasaki VN Voyager 1700

Kawasaki VN Voyager 1700

Cuando a cualquier persona le hablas de las motos custom, el primer comentario suele ser “qué bonitas son, ¡y qué cómodas!” Bueno, este es un comentario que demuestra que no han montado mucha sobre alguna de las minimalistas custom monoplaza y con manillar “cuelga monos” que hay en el mercado. No obstante, lo cierto es que a casi todos nos viene a la cabeza la imagen de unos duros motoristas atravesando la mítica ruta 66 viajando hacia el horizonte .
Las custom ruteras siempre han existido, pero lo cierto es que hasta hace muy poco, estos modelos exclusivos y siempre caros y complicados de llevar eran patrimonio exclusivo de la fábrica custom por excelencia. O sea, Harley Davidson. Buscando esa parte del pastel, las marcas japonesas comenzaron a presentar tímidamente modelos de este segmento allá por los 80, pero la primera que se atrevió a atacar frontalmente a las Harley de gran cilindrada fue Kawasaki con la Sumo 1400 . Este modelo rápidamente pasó a ser la Vulcan 1500, que ya tenía un modelo Tourer, como la tuvo las siguientes 1600 y también las 1700 aparecida este año. Precisamente con esta nueva familia Kawasaki dado un paso más hacia el turismo sin fronteras, incansable y más radical con un modelo preparado para afrontar los kilómetros que sean necesarios con la mayor comodidad posible y que, a pesar de su aspecto clásico, encierra toda la última tecnología que podemos esperar de una moto moderna. Se trata de esta Voyager que probamos para tí en esta ocasión.
Nuestro equipo de pruebas se protege con:

Cascos: Nitro , Givi , NZI , Shad y LS2
Cazadoras: Nitro, Motorrad, Teknic y Scott
Monos de cuero: Motorrad y Teknic
Guantes y botas: Teknic , Rainers
Agradecimientos a MGE y las cadenas de tiendas Motorrad y Basi

Kawasaki VN Voyager 1700

Aquí está la gran baza de este modelo y por lo que se distingue clara y abismalmente de la competencia: una cantidad ingente de tecnología. De momento, empezando por el motor, se trata de 1700 evolucionado de las anteriores 1500 y 1600. Un V2 a 50° de precioso diseño y perfecta manufacturación , cuya imagen evoca el más puro espíritu custom… lo que es lo mismo que decir parecerse lo más posible al Big Twin de Harley Davidson.
Y lo consigue estéticamente, pero no sólo eso, sino que a la hora de arrancar y rodar hace gala de una suavidad absolutamente admirable. Con sistemas electrónicos para el control del ralentí y la alimentación, incorpora también un acelerador “wireless” al estilo de las deportivas más evolucionadas - Las Yamaha R o las Aprilia, por ejemplo- que puede parecer excesiva tecnología para una moto de espíritu y aspecto tan retro, pero pensar así es un error. Gracias a ello, el tacto y la suavidad de este grandísimo propulsor te arrulla durante los kilómetros que tú te atrevas a hacer en una sola jornada, porque desde luego la Voyager nunca se cansará y siempre querrá más. Además, permite la incorporación de un estupendo sistema de control de velocidad de fácil accionamiento y perfecto funcionamiento presionando unos botones situados en la piña derecha. La excelente transmisión final por correa dentada aumenta esa sensación de suavidad y finura general.
La potencia declarada es bastante contenida si tenemos en cuenta su cilindrada, 71 CV, pero desde luego se muestra adecuada al espíritu tranquilamente rutero de esta Voyager. Además, para que no te aburras durante el viaje, equipa excelencias como un completo equipo de música controlable desde la piña izquierda y una pre instalación para un IPod de 8 GB que te regalan con su compra . Los consumos, eso sí, teniendo en cuenta su inmensa sección frontal y su peso, no puede ser demasiado contenidos: 8 l de media a los 100.
En su consola podemos ver todo tipo de información como puedan ser consumos medios instantáneos, e incluso un realmente útil indicador de marcha insertada cuya última relación aparece como OD, un “overdrive” que nos sirve para rodar en utopista a un régimen ínfimo de revoluciones reduciendo así el desgaste mecánico y el consumo.
Aquí también hemos de citar el sistema K-ACT, un repartidor electrónico de frenada que con sus diversos sensores reparte la presión sobre las pinzas de los tres discos de freno (dos delante y uno detrás) de modo que la moto siempre está perfectamente equilibrada por muy bruscamente que presionemos la maneta o el pedal. Simplemente perfecto, y que además se combina con un ABS que multiplica la seguridad dinámica respecto a otros modelos del segmento.

Kawasaki VN Voyager 1700

Seguro que viendo las fotos ya te imaginas lo cómoda que es, y te aseguro que aciertas . Con dos asientos que parecen verdaderos sofás, incluso con respaldo, dos maletas laterales de buena capacidad y un baúl insondable en la parte trasera, la capacidad de carga está más que asegurada . Delante nos ofrece prácticamente un carenado completo con un frontal ancho y alto que te asegura una protección sin igual del viento y el frío… pero que en verano te hace llegar todo el calor del motor junto con los faldones laterales que cubren las piernas. Eso sí, justo a los pies tiene dos entradas abatibles para permitir entrar aire fresco.
Todo esto redunda en un peso que supera los 400 kilos, por lo que realmente, y junto con las dimensiones y el particular diseño y reparto de masas de toda custom, la convierte en una moto que exige mucha experiencia y cierta forma física de su piloto. Desde luego, si quieres una moto para empezar, o solamente para usar en ciudad, no te la recomiendo. Es grande, muy grande, pesada, muy pesada y con una dirección lenta. En cambio, si quieres disfrutar de las mejores rutas y largos viajes con el suave ronroneo de un gigantesco bicilíndrico y un sabroso sabor custom- además de una seguridad y tecnologías sin par en el segmento-, aquí tienes el modelo a elegir.

Kawasaki VN Voyager 1700